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De Pati en Blanco

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GALICIA POR DENTRO: DE AROUSA A RUBIÁNS

Las opciones turísticas y de ocio que ofrece Galicia son infinitas y quizá la originalidad del disfrute pueda estar en el maridaje de las múltiples combinaciones que se pueden hacer. En esta ocasión nos planteamos una jornada en grupo de amigos, de Arousa a Rubiáns, con un objetivo, hacer una actividad de entretenimiento al aire libre y después una comida, con valor gastronómico, pero con cierto componente cultural e instructivo.

Como el tiempo ha estado este año muy generoso, estirando el verano hasta el otoño, optamos por combinar Mar y Tierra, con dos puntos calientes cercanos entre si para facilitar el movimiento del grupo.  Para el mar la Ría de Arousa, y para la tierra el Salnés, como resultante surgió un atractivo menú para un nuevo capítulo de Galicia por Dentro: de Arousa a Rubiáns,

Necesitábamos dos cómplices, y los encontramos de lujo. En la Illa de Arousa, la empresa  Piraguilla  https://www.piraguilla.com/ y en el Salnés, el Pazo de Rubianes , cerca de Villagarcía. La actividad de ocio y deportiva que elegimos fue una travesía en kayak de mar, con salida desde la zona norte de la Isla a un islote de la Ría, el de Areoso.

Un paraíso de unas 9 hectáreas de arena fina, a modo de oasis en medio de un mar calmado, protegido por un pequeño arrecife. Salimos en el kayak a un ritmo tranquilo, en plan paseo, disfrutando de un mar espejo que parecía un estanque, con una primera etapa que nos llevó a una mejillones, para que nos explicaran el proceso de extracción del mejillón.

Después nos dirigimos al islote para disfrutar del contacto con el oro blanco de su arena y recorrerla hasta la parte sur y más alta, en donde existe una construcción megalítica, un dolmen que se conserva en magníficas condiciones.

Construcción megalítica en el Islote de Areoso. Esculturas naturales de piedra
Construcción megalítica en el Islote de Areoso. Esculturas naturales de piedra

 

 

 

 

Situarse en el Islote de Areoso, tumbarse en la arena y mirar al cielo es el placer de convertirte durante unos momentos en un robinson, flotando en medio del mar. Si cierras los ojos te puedes sentir  sólo en medio de un océano, soñando que te protegen grandes gigantes de piedra, esculturas naturales derivadas de su conformación rocosa, y si los abres puedes contemplar la costa de la Ría de Arousa de la península del Barbanza, Ribeira, Puebla, Boiro, etc.

Una maravilla para los sentidos. La travesía es suave y muy asequible para todas las edades, el recorrido en kayak como hicimos al regreso, se puede programar de manera directa a la playa o bordeando alguna zona de costa. En cualquier caso es todo un disfrute.

LAS CAMELIAS Y EL VINO EN EL SEÑORÍO DE GALICIA

De la playa regresamos a las instalaciones de Piraguilla, en la Illa de Arousa, recogemos, nos cambiamos y nos dirigimos a cumplir nuestra segunda parte de la Galicia por Dentro: de Arousa a Rubiáns. Del mar de la Ría, a uno de los ríos de la vida, el del vino, porque nuestra comida programada en el Pazo de Rubianes,https://www.pazoderubianes.com/en Rubiáns, a unos 20 minutos en coche, era toda una tentación.

Desde la llegada al pórtico de la entrada, ya percibías la sensación que no ibas a entrar en un Pazo cualquiera, no en vano se trata del único Señorío de Galicia, el de Rubianes y sobre todo, más que por las edificaciones, por la majestuosidad de la finca y de su primer contacto con sus maravillosos jardines, presidido por el color de las camelias, que escondían los fabulosos viñedos de la magnífica producción que presenta bajo la marca Pazo de Rubianes .

Siguiendo las sugerencias de los anfitriones, decidimos dejar el recorrido por los jardines, camelios, caminos de arboleda, viñedos, etc. para el postre, pero como aperitivo cultural optamos por recorrer todas las estancias interiores del edificio central, después de acceder por sus escaleras de piedra.

El Pazo fue fundado en 1.411 y reconstruido 300 años después, precisamente esa reconstrucción dirigida por un arquitecto francés, le confiere un estilo afrancesado muy marcado, en salones, estancias y decoración. El peso de la historia a través de sus pinturas descansa sobre sus paredes, pero también a través de los múltiples elementos ornamentales, muebles de abolengo y lamparas de tradición, conviven con detalles personales de la familia propietaria.

La parada en la biblioteca fue obligada para respirar el olor del papel cautivo en obras centenarias.
La parada en la biblioteca fue obligada para respirar el olor del papel cautivo en obras centenarias.

 

 

 

 

De la casa a la mesa, pero antes pasando por un aperitivo copioso, servido en un espacio exclusivo, al aire libre, protegido entre paredes de piedra por un techo de enjambrado que dejaba colar la fuerza de la luz del día, para provocar un sol y sombra tentador.

Mesas altas de madera ubicadas en las cuatro esquinas, preparadas para recibir un pautado y equilibrado primer plato, compuesto de diversas degustaciones, en donde el sabor y la presentación, le conferían un muy alto nivel gastronómico, sin perder la perspectiva del producto autóctono y natural. Todo ello regado con un magnífico, porque de botella magnum se trataba, Pazo de Rubianes, blanco Rías Baixas de uva albariño.

SERVICIO IMPECABLE Y EXQUISITO MENÚ DEL RESTAURANTE RIOS

Empezamos con una empanada de maíz, por un lado de mejillones  y por otro de zamburiñas. El desfile continuó con unas croquetas de marisco y unos mejillones de un perfecto escabeche. A continuación unos cortes de queso fino en forma de flor, pimientos de padrón y unas tostas de bacalao marinado muy suave y crujiente con el pan a la hora de dar el bocado.

El formato de presentación permitió combinar el deguste de los diferentes platos con la animada tertulia y valoración de las sensaciones que nos iba transmitiendo el servicio que nos estaba prestando el Restaurante Ríos de O Freixo (Muros)www.riosfreixo.com/ Desde luego toda una garantía de éxito, por algo contaron con él, como pudimos corroborar después en el resto del menú, pero ya sentados en el comedor.

Aspecto del exclusivo espacio destinado al aperitivo como hall de acceso al comedor
Aspecto del exclusivo espacio destinado al aperitivo como hall de acceso al comedor

Ya sentados en la estancia interior y después de acomodarnos en diferentes mesas que convertimos en una para comunicarnos mejor, los camareros del Restaurante Ríos se dispusieron a completar su propuesta de menú, sirviendo el plato principal. Para unos, jarrete de ternera, y para otros, merluza a la gallega con una ajada suave y una guarnición de grelos. El punto dulce lo pusieron unas magníficas filloas rellenas de crema, para dar paso a los cafés y a un capítulo de licores, muy nuestros, aguardiente de hierbas, licor café, etc.

Viñedos del magnífico vino Pazo de Rubianes
Viñedos del magnífico vino Pazo de Rubianes

La temperatura de la tarde y las expectativas por recorrer las fincas exteriores, nos invitaron al paseo, después del ritual de visitar la tienda para llevarnos unas velas aromáticas, algún vino y el exclusivo aceite de camelia. Árboles milenarios, platanero, alcanforero, etc. con enjambre de raíces en su base, camelias de colores, rosas, rojas, blanquirosas, etc,  la piedra de construcciones auxiliares, el hórreo, el estanque de plantas acuíferas, la capilla, constituyeron las etapas de un excepcional recorrido que, después de pasear entre caminos de viñedos, nos llevó al punto más alto de la finca.

Desde allí, además de tener la perspectiva de medir la dimensión territorial del Pazo de Rubianes, recibimos el premio de ver el mar, el perfil de la Ría madre de Galicia, Arousa, en un horizonte que convirtió en regalo la elección de esta nueva ruta de Galicia por Dentro: de Arousa a Rubiáns.

Todo comenzó en el mar y la meta fue el vino. Lo tenemos al lado, lo podemos tocar con la mano, acariciar con la vista y degustar sorbo a sorbo. Galicia es así de generosa y tan sólo a un paso, seas del norte o del sur, a una hora de distancia como mucho, puedes construirte tu propio paraíso, en la tierra de los mil paraísos: Galicia.

 

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